1. Introducción
El índice Elcano de oportunidades y riesgos estratégicos para la economía española fue creado por miembros del Real Instituto Elcano de Estudios Internacionales y Estratégicos. Este índice permite el diseño de un radar de las oportunidades y riesgos estratégicos a los cuales la economía española debe enfrentase (Concha, Bersh y García, 2011). Esta representación brinda información concisa sobre la trayectoria que sigue la economía ibérica en la cimentación de sus relaciones económicas con otras naciones, por lo que se convierte en un insumo importante para orientar las políticas que deben seguir tanto los responsables políticos como el sector privado (Steinberg y Arahuetes, 2014).
Según Steinberg y Arahuetes (2014), el índice tiene como objetivo principal medir el grado relativo de interdependencia económica, financiera y comercial de España, con respecto a las demás economías del mundo, así como también la forma en que se desarrolla a lo largo del tiempo. Además, es una herramienta que permite a las empresas españolas visualizar los riesgos y oportunidades en función de los factores económico y geopolítico que presentan los distintos socios comerciales y financieros.
A pesar de no encontrar evidencia de que este modelo se haya aplicado para medir la interdependencia económica de otros países diferentes a España y Colombia (los cuales ya lo emplearon), existen diferentes textos que analizan las situaciones de dependencia de los países y el porqué de su importancia para la dinámica del mercado. Es el caso de Latinoamérica, tal como lo menciona Reyna (2002), que siempre estuvo abierta al embate de la iniciativa del capital y la inversión foránea, porque, ante un mercado débil, como el de dicha zona, los productos debían encontrar un espacio tanto de oferta como de demanda en los mercados internacionales. De esta manera, se asegura la obtención de divisas para fortalecer su mercado interno. Por otra parte, autores como Erquizio y Ramírez (2017) utilizaron la metodología del uso de ecuaciones, tal como se usa en el índice Elcano, para explicar el comportamiento de la balanza de pagos de México, incluyendo variables relacionadas con el comercio exterior. Esto les permite obtener datos sobre la dependencia de este país, con respecto al uso de bienes importados. Además, de acuerdo con Olivié y Molina (2011), algunas organizaciones internacionales, como los think tanks, han concebido ciertos índices con un enfoque hacia las relaciones internacionales contemporáneas, con el fin de apoyar la toma de decisiones. Esto debido a que, como ya se mencionó, en la literatura moderna no existen estudios empíricos que logren medir el poder de los diferentes países en el mundo globalizado.
Este estudio tuvo como objetivo presentar los resultados de la aplicación práctica del índice Elcano de oportunidades y riesgos estratégicos para la economía española en el contexto colombiano. Además, se valora la relevancia que tienen otras economías estimadas fundamentales en relación con otras consideradas como socios estratégicos. El índice Elcano ya cuenta con cinco versiones para el contexto español (Steinberg y Arahuetes, 2014). Concha et al. (2011) lo adaptaron por primera vez en la economía colombiana para mostrar su aplicabilidad a la realidad macroeconómica del país. Así pues, este es un esfuerzo por extender dicho estudio y hacer comparaciones de interdependencia entre economías del mundo. El presente artículo replica parte del estudio realizado por Concha et al. (2011), pero se actualiza con información de los últimos cinco años. Se decide realizar este estudio con el fin de analizar los cambios que se han podido presentar en el caso colombiano, y si se han modificado las relaciones con diferentes países.
La metodología empleada para este estudio fue un análisis de la aplicación del índice en la economía colombiana, a partir del uso de seis variables que fueron seleccionadas entre las diez propuestas por Steinberg y Arahuetes (2014).
Después de esta introducción, se presenta el marco teórico; en seguida, se describe la metodología empleada en el estudio; después se presentan los resultados y el análisis; y, por último, se ofrecen las conclusiones del estudio.
2. Marco teórico
En esta sección se presenta el índice Elcano creado por el Real Instituto Elcano (2014) que, desde el año 2005, compara las economías de los países, teniendo en cuenta su proyección internacional. Esta medición se realiza a partir de una serie de variables que permiten establecer la interdependencia en países, las oportunidades y riesgos que estos pueden generar en sus economías.
El modelo propuesto por Steinberg y Arahuetes (2014) desarrolla un índice construido sobre dos componentes fundamentales: 1) un índice de interdependencia económica que expresa la intensidad de las relaciones económicas bilaterales entre el país y varios de sus principales socios comerciales, desde la perspectiva colombiana; y 2) un índice de riesgo general -basado en los rankings de las agencias internacionales de calificación- que presentan dichas economías.
La interrelación que se presenta entre los índices de interdependencia económica y el de riesgo general permite elaborar el índice general de los riesgos y oportunidades teniendo en cuenta cinco zonas (figura 1): 1) socios fundamentales, en el área superior izquierda (países con los que existe un alto grado de interdepen-dencia económica y que presentan bajos niveles de riesgo); 2) oportunidades estratégicas, en la parte inferior izquierda (países con menores niveles de interdependencia y bajos niveles de riesgo); 3) retos estratégicos, en la zona central del radar (países con diversos grados de interdependencia y mayores niveles de riesgo); 4) riesgos estratégicos, en la zona superior derecha (países con los que se registran altos niveles de interdependencia ytambién elevados niveles de riesgo); y 5) riesgos en potencia, en la zona inferior derecha (países con grados de interdependencia medios o bajos y con muy altos niveles de riesgo) (Concha et al. 2011).
Las economías que se ubican en la zona de riesgos en potencia son aquellos países con los que se tienen relaciones económicas; pero la interdependencia de las variables en estudio es baja, y la calificación de riesgo está muy por debajo del grado de inversión. En la zona de las oportunidades estratégicas se ubican aquellas economías que se deben explorar y aprovechar; representan poco riesgo, pero tienen una interdependencia escasa con el país. Por último, la zona intermedia del radar, riesgos estratégicos, representa economías con un grado inversor intermedio. Estas economías sostienen relaciones en diferentes niveles de interdependencia, aunque no tan profundas como las que mantienen con los socios fundamentales.
2.1 Índice general de interdependencia económica
A partir de las principales partidas que conforman las balanzas de pagos bilaterales de un país, se elabora el índice general de interdependencia, con el fin de recopilar las transacciones corrientes y los movimientos de capital bilaterales de la economía colombiana con los países del mundo seleccionados para esta aplicación.
Steinberg y Arahuetes (2014) consideran que la interdependencia internacional de una economía está compuesta tanto de los movimientos de entrada como de los de salida de bienes, servicios y capitales. Teniendo en cuenta la importancia creciente de los movimientos de capital, se han incluido las cifras de inversiones directas realizadas y recibidas por los países.
En su propuesta, Isbell y Arahuetes (2007) definieron las siguientes variables como parte del índice Elcano de oportunidades y riesgos estratégicos para la economía española:
Exportación de productos: V1
Importaciones de productos a excepción de energía: V2
Importación de energía: V3
Flujos de turismo: V4
Flujos de inversión directa del país analizado hacia otros países: V5
Flujos de inversión directa de otros países al país analizado: V6
Stock de inversión directa del país analizado hacia otros países: V7
Stock de inversión directa de otros países hacia el país analizado: V8
Endeudamiento del país analizado en otros países: V9
Endeudamiento de otros países con el país analizado: V10
La fórmula elaborada por los investigadores para calcular el índice de interdependencia económica entre los países es la siguiente:
Donde:
I n es la interdependencia económica con el país n.
x kn es el valor de la variable k intercambiada con el país n en el año de estudio.
X k es el valor total de la variable k intercambiada en el año de estudio.
P k es el peso ponderado de la variable k (su valor es 1).
m es el número de variables utilizadas.
El índice de interdependencia busca representar en un número el nivel de interdependencia del país objeto de análisis, en este caso de Colombia, con otros países del mundo, mediante la elaboración de un cálculo adimensional, que impida los problemas procedentes de las unidades y que permita realizar comparaciones.
3. Metodología
El modelo descrito anteriormente se aplica para el análisis del índice de interdependencia económica en el contexto colombiano, que se explica a continuación. Al igual que en sus versiones españolas, en este ejercicio de aplicación, el índice se presenta como un radar de las oportunidades y riesgos estratégicos a los que se enfrenta la economía colombiana, en cuanto a su continuo proceso de internacionalización. Se seleccionó este método porque se considera claro y conciso, gracias a que evalúa diferentes variables que influyen sobre la economía colombiana. Sin embargo, este estudio solo ofrece una visión general sobre este tema, por lo que sería necesario realizar un análisis más profundo que considere todos los sectores productivos, incluyendo, ente otros factores, su capacidad competitiva.
Además, es importante recordar que este estudio fue diseñado específicamente para analizar la interdependencia económica de España. Por esta razón, no se pueden usar las mismas variables de nivel mundial. Por ejemplo, si se analizara una variable como el turismo, en el caso de España, esta tendría relevancia en el resultado; España está catalogado como uno de los países más visitados en el mundo. Esto no sucedería en países de Latinoamérica, como Colombia, pues esta variable no tiene mucha influencia sobre su economía y solo representa el 2% (datos del 2019) del Producto Interno Bruto (PIB) nacional (Clavijo, 2019).
3.1 Construcción del radar
Como ya se mencionó, el radar se construye a partir de dos insumos. Primero, un índice de interdependencia de la economía colombiana y, segundo, una calificación de riesgo de la economía en estudio. Estos índices se ordenan en un eje de 90 grados, como lo muestra la figura 1, el nivel de interdependencia se ubica en el eje de ordenadas y el riesgo correspondiente a la economía, en el eje de abscisas. De esta manera, se ordenan los países en estudio, en cada una de las zonas descritas en el apartado anterior.
Debido a la falta de información (en algunos casos) y a la realidad de la economía colombiana, se han revisado algunas de las anteriores variables. En este orden de ideas, la variable V3 se descartó porque no es relevante para el país, pues Colombia no importa energía; por el contrario, es el séptimo mayor exportador de Latinoamérica y se ubica en el puesto 70 en el mundo (Central Intelligence Agency, 2017). A pesar de ello, estos no son datos relevantes en las exportaciones totales. La variable V4 también se descartó, pues las bases de datos disponibles solo cuentan con información desde 2011. Asimismo, históricamente, Colombia no ha tenido grandes entradas y salidas de turistas. Por su parte, la información correspondiente a la deuda externa (V9 y V10) se encuentra totalizada tanto en deuda pública como privada, y no desagregada por países. Por lo tanto, las variables que se usan para esta aplicación en el contexto colombiano son:
Exportación de productos: V1
Importación de productos: V2
Flujos de inversión directa del país analizado hacia otros países: V3
Flujos de inversión directa de otros países al país analizado: V4
Stock de inversión directa del país analizado hacia otros países: V5
Stock de inversión directa de otros países hacia el país analizado: V6
Teniendo en cuenta el desarrollo realizado por Steinberg y Arahuetes (2014) para la economía española, todas las variables se han tomado en valores absolutos, pues lo que se debe analizar es la intensidad de la relación sin tener en cuenta su sentido. Solo los flujos netos de inversiones directas pueden presentar valores negativos, esto se da cuando se presentan desinversiones; pero, incluso en los casos en los que se dan, se han tomado con signo positivo. Esta estrategia se adopta para el presente análisis, pues el estudio de referencia no los realiza de esta manera. Es importante resaltar que para estas variables (V3 y V4) se han desestimado de los valores totales los flujos de inversión con origen o destino a los denominados “paraísos fiscales”. Esto con el fin de evitar sesgos generados por variaciones atípicas en los niveles de inversión1. Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), los siguientes países son catalogados como paraísos fiscales: Andorra, Anguila, Antigua y Barbuda, Curazao, Aruba, Bahamas, Baréin, Belice, Bermudas, Chipre, Dominica, Gibraltar, Granada, Guernsey, Islas Cook, Isla de Man, Islas Caimán, Islas Marshall, Islas Turcas y Caicos, Islas Vírgenes Británicas, entre otros.
Asimismo, la idea de incorporar los stocks de inversiones extranjeras directas se considera pertinente, pues son elementos de interdependencia a largo plazo entre el país emisor y receptor; por ende, son complementarios a la evolución de los flujos netos anuales de inversión extranjera directa (IED). Cada variable ha recibido la ponderación 1.
Según Steinberg y Arahuetes (2014), el objetivo fue representar la interdependencia del año para el que se elabora el índice, y también el rasgo de interdependencia estructural derivado de la acumulación de IED, tanto emitida como recibida. Por tanto, se trata de reflejar la interdependencia existente, a pesar de la volatilidad que dichos flujos puedan tener año tras año.
3.1.1 Índices de interdependencia con respecto a los vínculos comerciales y de inversiones extranjeras directas
Steinberg y Arahuetes (2014) consideraron necesario la elaboración de dos índices desagregados para analizar, de forma diferenciada, los orígenes de la interdependencia económica, tanto en comercio como en inversiones directas. Con esto, se busca analizar si la interdependencia general se presenta por las relaciones comerciales y por las inversiones directas, o si la interdependencia se da, principalmente, en uno de estos ámbitos.
Existen dos variables mediante las cuales se establecen las relaciones comerciales. De esta forma, el índice de interdependencia de comercio está compuesto por:
Por su parte, el índice de interdependencia en inversiones directas está constituido por las cuatro variables que acumulan los flujos y el stock de las inversiones directas, tanto realizadas como recibidas:
Flujos de inversión directa del país analizado hacia otros países: V3
Flujos de inversión directa de otros países al país analizado: V4
Stock de inversión directa del país analizado hacia otros países: V5
Stock de inversión directa de otros países hacia el país analizado: V6
El índice de interdependencia de comercio y el índice de interdependencia financiera, con los cuales se construyen los radares específicos, se calculan con la misma ecuación con la que se calcula el índice general.
3.1.2 Calificación de riesgo
Debido a la complejidad en la búsqueda y a los pocos recursos disponibles para la construcción de índices de riesgo propios, se ha concluido que para la elaboración de los radares (general, de comercio e inversiones directas) se opte por usar un índice de riesgo-país ya publicado (Steinberg y Arahuetes, 2014). En esta aplicación particular, se usarán los índices publicados por Standard & Poor’s en los informes anuales S&P Global Ratings (Bloomberg, 2017). De acuerdo con esto, se establecen los niveles de riesgo de los países: riesgo bajo aquellos que tengan calificación A, riesgo medio aquellos que tengan calificación B y riesgo mayor aquellos que tengan calificaciones C y D.
3.2 Elección de los países de estudio
Para este ejercicio se seleccionaron los países que se constituyen como los principales destinos de las exportaciones colombianas: Estados Unidos, la Unión Europea (para la que se recogen en un solo bloque los 27 países que la conforman), Panamá, China, Ecuador, Brasil, Turquía, México, Perú y Venezuela. Los otros destinos a donde llegan productos colombianos se descartaron, pues durante 2017 representaron menos del 1% en las exportaciones totales de Colombia (Departamento Administrativo Nacional de Estadística [DANE], 2018). Por la coyuntura actual del comercio exterior colombiano, en el estudio también se han tenido en cuenta otros países: Corea del Sur, por ser el primer país de Asia con el que Colombia cierra un tratado de libre comercio (TLC) (Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, 2017). Además, Australia, Canadá, Nueva Zelanda y Singapur porque son candidatos para convertirse en Estados Asociados de la Alianza del Pacífico (AP), mecanismo de integración profunda del que Colombia hace parte (Alianza del Pacífico, 2017).
4. Resultados y análisis
Como se mencionó anteriormente, uno de los objetivos del trabajo fue hacer una comparación temporal para examinar la evolución de la interdependencia, así como la clasificación de cada país seleccionado como socio de la economía colombiana. Por ello se han seleccionado varios años de estudio posteriores a la aplicación realizada por Concha et al. (2011) para el año 2007. Los años estudiados son 2008, 2011, 2014 y 2017. Las figuras 2, 3, 4 y 5 muestran los mapas de interdependencia respectivos para cada año. Asimismo, se promediaron los índices de interdependencia económica calculados para el periodo 2005-2017. Esto permitió obtener el nivel medio de interdependencia para los últimos años. Este cálculo se muestra en la tabla 1.
País | Interdependencia media |
---|---|
Estados Unidos | 25,23 |
Unión Europea | 23,30 |
Panamá | 10,25 |
México | 6,38 |
Brasil | 4,16 |
Perú | 3,87 |
Chile | 3,75 |
China | 3,17 |
Venezuela | 2,34 |
Ecuador | 1,53 |
Canadá | 1,50 |
Corea | 0,54 |
Turquía | 0,26 |
Singapur | 0,14 |
Australia | 0,06 |
Nueva Zelandia | 0,01 |
Fuente: elaboración propia a partir de cifras del DANE (2018).
Aunque la tabla 1 resume en gran medida el nivel de interdependencia económica de Colombia con los países en estudio, también se debe considerar cómo ha sido la evolución de dicho nivel de interdependencia. Es evidente que, como lo muestra la tabla 1, Estados Unidos y la Unión Europea se constituyen como los mayores socios económicos de Colombia, al presentar los mayores niveles de interdependencia; seguidos por Panamá, con un nivel relativamente alto. México muestra un nivel medio, mientras que Brasil, Perú, Chile, China y Venezuela presentan un nivel medio-bajo. El resto de los países del estudio presentan niveles muy bajos, incluso tienden a cero (Australia y Nueva Zelanda).
Si bien Estados Unidos y la Unión Europea exhiben las cifras más altas, estas presentan tendencias negativas. La de Estados Unidos un poco más marcada, debido a una leve recuperación de la Unión Europea en los últimos años, que la ubica como la economía con la que Colombia tuvo mayor interdependencia en el 2017 (figura 5). Sin embargo, se debe tener en cuenta que se está tomando la Unión Europea en conjunto, y es de esperarse que un análisis pormenorizado de cada uno de sus países arroje niveles de interdependencia económica menores. Respecto a Panamá, es importante mencionar que la tendencia fue positiva hasta 2013 y que, desde entonces, los niveles de interdependencia permanecen estables.
En cuanto a los países con niveles medios de interdependencia, cada caso es muy diferente. Aunque en los últimos dos años el nivel de interdependencia económica de Colombia con México prácticamente no ha cambiado, en años anteriores este nivel solía ser muy volátil, debido, sobre todo, a los cambios en los flujos de IED, entre ambos países. Brasil, por su parte, presenta un nivel de tendencia estable con Colombia, mientras que las tendencias de Chile y China, al igual que las de Perú, son positivas.
Pese a que Venezuela presenta un nivel de interdependencia económica medio-bajo con Colombia, la tendencia de este nivel es totalmente negativa. Tanto así que, en los últimos años de estudio, el nivel de interdependencia colombo-venezolano es bajo. El resto de los países del estudio, a pesar de presentar niveles de interdependencia económica bajos, muestran en general tendencias positivas de estos niveles, y un importante crecimiento para la economía colombiana.
4.1 Radar general de oportunidades y riesgos estratégicos de la economía colombiana
A partir de la metodología descrita, que ubica la interdependencia económica en el eje y y el riesgo en el eje x, se construyeron los radares que se presentan a continuación.
En la figura 2 se puede observar el radar para el año 2008. En este año los países se ubicaron en tres zonas del radar: Estados Unidos y la Unión Europea como socios fundamentales; Australia, Canadá, Corea, Chile, China, Nueva Zelanda y Singapur como oportunidades estratégicas; y el resto de los países del estudio como retos estratégicos.
La figura 3 muestra el radar general de oportunidades y riesgos estratégicos de la economía colombiana para el año 2011. No se presentaron cambios fundamentales frente al radar de 2008. Sin embargo, se observa una caída importante en el nivel de interdependencia de Brasil, frente a una subida del nivel de interdependencia de México. Asimismo, se advierte cómo Venezuela empieza a trasladarse hacia la parte baja derecha de la caja, con un menor nivel de interdependencia y mayor riesgo.
Al igual que la figura 3, la figura 4 tampoco muestra grandes cambios: cada uno de los países en estudio ha permanecido en la misma área del radar a lo largo de los años. La variación más importante entre 2011 y 2014 fue la relevancia que empieza a tomar China, como socio económico de Colombia, siendo aquel el país con mayor interdependencia de los clasificados como oportunidades estratégicas.
La figura 5 muestra la aplicación más reciente del radar general de oportunidades y riesgos estratégicos de la economía colombiana, con datos de 2017. Para este año es aún más evidente el cambio de posición de Venezuela respecto a los radares anteriores, aunque debe anotarse que todavía no ha cambiado su calificación como reto estratégico. Es importante anotar el comportamiento de Panamá, que para el año 2017 tuvo una interdependencia mayor que cualquiera de los países calificados como oportunidades estratégicas.
Estados Unidos y la Unión Europea se erigen como los socios fundamentales de la economía colombiana; aunque en los últimos años hay más profundidad en las relaciones con la Unión Europea, porque se refleja un mayor grado de interdependencia por los mayores niveles de inversión de esta región en el país, más altos que los de Estados Unidos desde 2013. Este resultado era de esperarse, dado que a estos países corresponde aproximadamente el 45% de las exportaciones colombianas y un poco más del 40% de las compras en el exterior, origen del 40% de los dólares que ingresan al país por concepto de IED.
Los países de esta aplicación, clasificados como oportunidades estratégicas para Colombia, son Australia, Canadá, Corea, Chile, China, Nueva Zelanda y Singapur. Entre estos se destacan Chile y China como aquellos con mayor grado de interdependencia, respecto a los mencionados. Todos estos países representan un potencial que debería ser aprovechado, pues podrían implementarse políticas públicas para desarrollar la interdependencia económica para transformarlos en socios fundamentales. Al respecto, cabe mencionar que Australia, Canadá, Nueva Zelanda y Singapur están adelantando procesos para convertirse formalmente en Estados Asociados a la AP, reconocido mecanismo de integración profunda entre Chile, Colombia, México y Perú (Alianza del Pacífico, 2017). De la misma manera, desde julio del 2016, entró en vigencia el TLC entre Corea del Sur y Colombia, el cual establece que el 96% de la oferta exportable del país entra sin aranceles al país asiático (Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, 2017). Estos mecanismos de facilitación entre Colombia y los países mencionados permiten una mayor interdependencia en un periodo de mediano plazo.
El resto de los países del estudio, Brasil, México, Panamá, Perú, Turquía y Venezuela, se ubicaron en todos los periodos en la zona de Retos Estratégicos. Se destacan los casos de México y Panamá, cuyos grados de interdependencia eran superiores que cualquier país ubicado en la zona de oportunidades estratégicas. Sin embargo, debido a su calificación de riesgo, se ubican en la zona central del radar.
Vale la pena analizar detenidamente el caso de Venezuela, país que históricamente ha tenido fuertes lazos comerciales y de inversión con Colombia. No obstante, debido a la crisis política y económica del país bolivariano (inicios del siglo XXI), se ha reducido su importancia como socio económico de Colombia. Esto se puede observar en las figuras 2, 3, 4 y 5, en las que la posición de Venezuela se desplaza en el tiempo hacia abajo y a la derecha del radar. Es de esperarse que, de no cambiar su situación en los próximos años, se clasifique como un riesgo en potencia. En los últimos años, este escenario es aún más evidente, con la evolución del grado de interdependencia económica entre Colombia y Venezuela. La figura 6 muestra una tendencia negativa bien marcada.
Ninguno de los países del estudio fue clasificado como riesgo en potencia o riesgo estratégico, pues todos los que se seleccionaron para esta aplicación contaban a lo largo de los años con una calificación de riesgo superior al umbral de grado de inversión; es decir, mayor a B+ de la calificación Standard & Poor’s.
4.2 Radar de oportunidades y retos de la economía colombiana de las relaciones comerciales y de las inversiones directas
Para una mejor comprensión de las relaciones económicas de Colombia con los países presentados en el estudio, se ha realizado una ampliación del radar general, mediante la separación de las relaciones comerciales de las de inversión directa. Así, se ha hallado un índice de interdependencia específico para cada ámbito (ver Metodología). Este ejercicio evidencia si la interdepen-dencia general de Colombia, con un país en particular, se explica mejor por las relaciones comerciales o por las relaciones de inversión. Asimismo, hacer una subclasificación de los países para identificar oportunidades y riesgos estratégicos por cada tipo de relación.
Así pues, al desarrollar un ranking simple entre los países de estudio2, con el promedio de los valores de interdependencia general, de interdependencia comercial y de interdependencia de inversiones directas del periodo 2005-2017, se puede obtener un ordenamiento que muestra la importancia de cada país respecto a cada uno de estos ámbitos.
Como lo muestra la figura 7, los primeros dos puestos del ranking general de comercio y de inversiones directas los ocupan Estados Unidos y la Unión Europea respectivamente. Se aclara que la Unión Europea cuenta con una interdependencia mayor, en cuanto a inversiones directas se trata; esto se explica porque cada año, de esta región, proviene poco más del 30% de la IED en el país (Banco de la República, 2017). En el año 2017, esta participación era aún mayor: tan solo España, Holanda e Inglaterra habían invertido USD 3400 millones de los 10.200 registrados a la fecha (Banco de la República, 2017).
Los países de la AP, México, Perú y Chile, comparten realidades similares, pues ocupan el cuarto, sexto y séptimo puesto, respectivamente, en el ranking de interdependencia económica general, y sus posiciones no varían en gran medida en los otros dos ámbitos. México también ocupa el cuarto puesto tanto en la interdependencia comercial como de inversión; mientras que Perú y Chile ocupan el octavo y noveno lugar en relaciones comerciales, y el quinto y sexto en materia de inversiones, respectivamente. Asimismo, los otros países vecinos de Colombia, Venezuela y Ecuador ocupan el noveno y décimo puesto respectivamente en el índice de interdependencia general. Sin embargo, las relaciones comerciales son más profundas que incluso las de Perú y Chile.
Por último, cabe destacar el caso de Canadá. Aunque su interdependencia económica general lo ubica por fuera del top 10 del ranking, en los últimos años los flujos de IED, provenientes de este país norteamericano, han generado que, en materia de inversiones directas, ocupe el octavo puesto en importancia entre los países estudiados.
Gracias a la desagregación del índice general en los índices de comercio y de inversiones directas, se pueden generar dos nuevos radares de oportunidades y retos para la economía colombiana, en cada uno de estos ámbitos. Es importante mencionar que, para el radar relacionado con las inversiones directas, se seguirá midiendo el riesgo-país con las clasificaciones de riesgo, desarrolladas por Standard & Poor’s. Sin embargo, para el radar relacionado con el comercio, se considera más adecuado el uso de las calificaciones de riesgo elaboradas por el Consenso de la OCDE (con una escala de 0 a 7) para analizar el riesgo comercial. Si bien estos índices de riesgo tienen sus puntos débiles, se han elegido, pues son utilizados como referencia de riesgo por los países y por los agentes económicos que operan en los mercados internacionales (Steinberg y Arahuetes, 2014).
En las figuras 8 y 9 se presentan el radar de oportunidades y retos de la economía colombiana de relaciones comerciales y el radar de oportunidades y retos de la economía colombiana de inversiones directas, respectivamente. Es importante aclarar que esta aplicación del modelo solo se realizó para el año 2017.
Aunque a grandes rasgos parece que hubiese grandes diferencias en los radares presentados, en términos generales solo existe una oposición fundamental en el radar de oportunidades y riesgos de la economía colombiana de relaciones comerciales, en el cual se ubican Ecuador y Venezuela como riesgos en potencia. El resto de los países del estudio permanecen en las zonas ubicadas en el radar general; sin embargo, en las gráficas también se puede apreciar la diferencia en la interdependencia de los socios fundamentales; así, con Estados Unidos se mantiene una fuerte interdependencia comercial, mientras que con la Unión Europea el lazo es más fuerte en términos de IED.
Las diferencias que se aprecian en los países clasificados como oportunidades estratégicas son similares a las ya descritas. Por ejemplo, con China se tiene una alta interdependencia comercial, comparada con el resto de los países de esta zona del radar. Sin embargo, la situación es totalmente diferente en términos de inversión. Con Chile, la situación es al revés: hay mayor interdependencia de inversiones directas frente a la comercial (figuras 8 y 9).
En cuanto a los países ubicados en la zona de retos estratégicos, el caso más relevante es el de Panamá, dado que la interdependencia comercial de Colombia con el istmo es baja. Sin embargo, la interdependencia en inversiones directas es alta, incluso más alta que con Estados Unidos. De Panamá ha llegado aproximadamente el 13,5% de la IED a Colombia, y ha sido el destino de al menos el 18% de la inversión colombiana en el exterior en los últimos años.
4.3 Relaciones de Colombia con algunos de los países del estudio
A partir de los resultados encontrados en el apartado anterior, vale la pena hacer un análisis pormenorizado de algunos casos particulares: 1) las relaciones tanto comerciales como de inversión con los socios fundamentales, Estados Unidos y la Unión Europea; 2) la evolución del crecimiento del flujo comercial con China, así como el detrimento de dicho flujo con Venezuela; 3) el análisis de los flujos de IED entre Panamá y Colombia, en especial los que van del territorio nacional hacia el istmo; y 4) la relevancia de la AP para la economía colombiana.
4.3.1 Socios fundamentales: Estados Unidos y la Unión Europea
Era de esperarse que estos dos socios de Colombia se configuraran como los fundamentales a la luz del estudio. Estos países son el destino del 45% de las ventas colombianas en el exterior; el 30% va hacia Estados Unidos y el otro 15%, a la Unión Europea. El origen de las importaciones son 25% y 15%, respectivamente. De estos países proviene el 40% de la IED; en este caso, con mayor participación de la Unión Europea (25%). Si bien la IED de Colombia en el exterior no se ha concentrado durante los últimos años en estos destinos, Estados Unidos fue el país receptor: 30% y 50% de ella.
Colombia exporta a estos países productos de las industrias extractivas o productos básicos agrícolas. La tabla 2 muestra los principales productos exportados hacia esos destinos. En el caso de Estados Unidos, estos productos representan el 80% de las exportaciones colombianas que llegan a ese país; mientras que, para la Unión Europea, representan el 75% aproximadamente.
Estados Unidos | Unión Europea |
---|---|
Aceites crudos de petróleo Flores Café Aceites de petróleo Oro Hullas y combustibles sólidos | Hullas y combustibles sólidos Café Plátanos Aceites crudos de petróleo |
Fuente: elaborado a partir de International Trade Centre (2018).
Las importaciones son productos de industrias con alto valor agregado, como medicamentos, automóviles, aparatos eléctricos y medios de transporte aéreo; y algunos bienes que no se producen internamente en el país, como cereales y reactores químicos (tabla 3). Los productos aquí expuestos representan el 60% de las importaciones colombianas provenientes de Estados Unidos y el 30% de la Unión Europea.
Estados Unidos | Unión Europea |
---|---|
Combustibles Máquinas y sus partes Cereales Productos químicos orgánicos Plástico y sus manufacturas Aparatos y material eléctrico Automóviles | Medicamentos Automóviles Sangre preparada para usos terapéuticos Helicópteros, aviones y demás aeronaves Combustibles Partes y accesorios de automóviles |
Fuente: elaborado a partir de International Trade Centre (2018), DANE (2017).
4.3.2 China y Venezuela
Estos países representan dos situaciones completamente diferentes en sus relaciones con Colombia. Si bien, en términos de inversiones directas, ambos cumplen un papel marginal al aportar menos del 0,5% de los flujos de IED, en términos comerciales, estos países tienen (o han tenido) una relevancia muy importante para la economía nacional.
Tradicionalmente, Venezuela había sido uno de los principales socios comerciales de Colombia. Hasta 2009, el país bolivariano era el destino de más del 10% de las ventas externas colombianas. Sin embargo, su situación política interna ha tenido fuertes impactos negativos en la economía, que han generado pérdidas generalizadas del poder adquisitivo, a tal punto que hoy Venezuela compra menos de USD 1000 millones en productos colombianos. Esta cifra representa apenas entre el 1% y el 2% de las exportaciones totales de Colombia.
China, por el contrario, es un “socio nuevo” para el país. Antes de 2005 el flujo comercial (exportaciones + importaciones) apenas alcanzaba los USD 2000 millones, cifra incluso menor que las exportaciones a Venezuela en el mismo año. Sin embargo, a partir de ese año el flujo comercial con el país asiático creció a un ritmo del 28% anual, que se explica especialmente por el crecimiento de las importaciones.
Actualmente, China es el origen de más de USD 8000 millones de las compras colombianas en el exterior, que lo posicionan como el segundo proveedor de Colombia en el mundo, después de Estados Unidos y por encima de la Unión Europea (a la que superó desde 2011).
Colombia importa de China manufacturas de distintos sectores, entre los que se encuentran aparatos eléctricos, manufacturas de hierro, manufacturas de plástico y juguetes. Además, bienes intermedios e insumos, como productos químicos orgánicos y fundiciones de hierro y acero. Las exportaciones no se han quedado atrás. Si bien el crecimiento de estas empezó años después, en comparación con las importaciones, hoy China es el tercer destino de las exportaciones colombianas. Por el contrario, si se toma a la Unión Europea en conjunto, China sería el segundo. La figura 10 muestra la evolución de las exportaciones colombianas hacia China y Venezuela; en ella se observa el acelerado crecimiento de las ventas externas de Colombia al país asiático, en detrimento de las exportaciones hacia Venezuela.
4.3.3 Panamá
Panamá se ha convertido en el principal destino de la IED colombiana en el exterior. A ese país, los inversores colombianos destinan año tras año, en promedio, más del 20% de los recursos puestos en el exterior. Muestra de ello son las cifras disponibles en el Banco de la República al 2017 (Banco de la República, 2017). La participación del istmo en este ítem es del 24% (figura 11). En 2014, según un informe de la Cámara de Comercio e Industrias Colombo Panameña, el mercado panameño contaba con la participación de más de 200 empresas colombianas, con una inversión que ascendía a los USD 6560 millones. Al 2020, esta inversión acumulada supera los USD 8000 millones. Los sectores en los que las empresas nacionales tienen mayor participación son el financiero y la construcción. Además, existen plantas de producción de alimentos, de elementos de acero y de cemento, entre otros productos.
Panamá es considerado un puente estratégico, pues cuenta con la posibilidad de acoger diferentes estructuras de inversión, como holdings, que luego pueden ser materializadas en otros países. De acuerdo con lo anterior, no siempre los flujos de inversión directa, que ingresan a Panamá, tienen como fin realizar inversiones productivas, pues también fluyen hacia otros destinos.
4.3.4 La Alianza del Pacífico
La AP es una unidad en la cual se integran diferentes países de la región latinoamericana. Está conformada por Chile, Colombia, México y Perú. Fue establecida en abril de 2011 y constituida formal y jurídicamente el 6 de junio de 2012 mediante la elaboración y firma del Acuerdo Marco. Esta integración busca establecer mercados atractivos entre sus países miembros, con el fin de alcanzar una mayor competitividad internacional (Alianza del Pacífico, 2017). Entre sus objetivos están 1) construir un área de integración profunda para la libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas; 2) impulsar un mayor crecimiento, desarrollo y competitividad de las partes; y 3) convertirse en una plataforma de articulación política, económica y comercial, de proyección al mundo, con énfasis en Asia-Pacífico. Por lo anterior, es uno de los ejes fundamentales de las estrategias de internacionalización del Gobierno nacional. Vale la pena examinar la evolución de la interdependencia de la economía colombiana con los socios de la AP.
En términos generales, los niveles de interdependencia de la economía colombiana, con cada una de las economías de los países miembros de la AP, son de carácter medio. Sin embargo, al desagregar la interdependencia comercial de la interdependencia en inversiones directas, se hallan resultados relevantes. Como lo muestra la figura 12, la interdependencia comercial no se ha modificado, y los niveles permanecen prácticamente constantes en el tiempo. Esto explica por qué, previo a la creación de la AP, ya existían los TLC entre los países miembros (el protocolo comercial de la AP apenas entró en vigor el 1.o de mayo del 2016). Así mismo, el comercio entre los países miembros es poco complementario, a excepción de México. Los miembros de la AP son principalmente exportadores de commodities, lo que genera pocas opciones para el comercio interindustrial.
Sin embargo, en términos de inversiones, el panorama cambia, y es diferente para cada uno de los países. Si se considera la AP como un solo país, este sería el principal destino de la IED de Colombia en el exterior, al recibir el 26% de estos flujos (figura 11). Además, México se constituye como uno de los principales emisores de la inversión que llega a Colombia. Según cifras del Banco de la República, en lo corrido de 2017, el país norteamericano aportó más del 13% de las divisas ingresadas al país por este concepto (Banco de la República, 2017).
La figura 13 muestra la evolución del nivel de interdependencia en inversiones directas entre Colombia y los países miembros de la AP: Chile, México y Perú. En esa figura se observa que, a pesar del comportamiento volátil de este índice para los años del estudio, se evidencia una tendencia positiva en la interdependencia con Chile y México, frente a una negativa en el mismo ítem con Perú. Esto se explica principalmente por la alta participación de las inversiones en territorio peruano de las operaciones colombianas, especialmente en los años 2007 y 2009. Posteriormente, el nivel de interdependencia con Perú ha permanecido prácticamente invariable.
5. Conclusiones
La metodología implementada para este estudio procede del Real Instituto Elcano, conocido como un think tank. El instituto fue creado por el Estado español y cuenta con independencia y reconocimiento. Sin embargo, este análisis no pretende profundizar en la internacionalización, ni en los riesgos de las exportaciones e inversiones internacionales de Colombia. Por el contrario, busca ofrecer una opción para la economía colombiana, que se aproxime a los objetivos del think tank español.
A la luz de este estudio, la evolución del espectro económico de Colombia en el ámbito internacional no ha generado grandes cambios en los últimos doce años (periodo del estudio). Esto se refiere a las relaciones de comercio e inversión y a la interdependencia que tiene la economía colombiana respecto a la clasificación de los socios económicos del país.
Los países estudiados se ubicaron siempre en los mismos sectores del radar, tanto a lo largo de los años como en la desagregación del radar general, en el radar comercial y en el radar de inversiones directas. Con excepción de Ecuador y Venezuela, que en el radar comercial obtuvieron una clasificación como riesgo en potencia, frente a la clasificación como retos estratégicos en los demás radares. Lo anterior se explica por el uso del índice de riesgo comercial de la OCDE, que califica a estos países con un mayor riesgo frente a la calificación de Standar & Poor’s.
Estos resultados implican que la configuración de las relaciones económicas de Colombia con los países estudiados no responde a coyunturas específicas del contexto económico, comercial o del clima de inversiones. Por el contrario, las relaciones tienen características estructurales, como la de Venezuela, que, por su crisis interna, ha deteriorado las relaciones internacionales con Colombia. Es de esperarse que, en unos años, ese país sea peor calificado. En contraste con China, del que se puede afirmar que es el tercer socio comercial para el país.
Así pues, el análisis que va de 2005 a 2017 tan solo arroja dos socios fundamentales para el país: Estados Unidos y la Unión Europea. Teniendo en cuenta que la Unión Europea se está tomando en conjunto y que, seguramente, un análisis desagregado por países de esa zona daría como resultado que el único socio fundamental de Colombia es Estados Unidos. Esta situación se debe a que existe una alta concentración de las relaciones tanto comerciales como de inversión de Colombia en estos territorios.
Una posible explicación a esta situación es el hecho de que varios de los países que tienen la posibilidad de convertirse en los socios más importantes para el comercio colombiano son potencialmente riesgosos (Ecuador), o viven una situación crítica como Venezuela. De la misma manera, no se está sacando el suficiente provecho de algunas oportunidades con un fuerte potencial, como el caso de Canadá y los países de la AP. Si bien en casos como estos los niveles de interdependencia no son altos, representan oportunidades que deberían aprovecharse para que sean transformados en socios fundamentales. Se espera una mayor dinámica en los próximos años de la AP, tanto entre sus miembros fundadores como con los países candidatos a ser Estados Asociados del mecanismo de integración, entre los cuales se encuentra Canadá.
Hasta el año 2020, la AP no ha generado grandes impactos en la dinámica económica nacional, o por lo menos en lo que se refiere al peso relativo y al nivel de interdependencia de los países miembros con Colombia. Sin embargo, la AP representa una alternativa de integración innovadora para Colombia, debido a que ha sido planteada mediante un proceso abierto y flexible, con metas claras y coherentes con el modelo de desarrollo y la política exterior del país (Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, 2013). Por ende, es de esperarse que las relaciones con los países miembros se intensifiquen a medida que se consolida la alianza misma.
Como conclusión, Colombia debe procurar el aumento del número de socios fundamentales. Esto para no depender en gran medida de Estados Unidos y de la Unión Europea; especialmente por la actual coyuntura en las relaciones con Estados Unidos, pues se espera que su Gobierno tome decisiones en materia comercial. Sin duda, esto tendrá efecto en la recuperación de la crisis económica. Además, se debe tener en cuenta que este trabajo permite valorar que los países catalogados como “socios fundamentales” corresponden a países que aportan un alto porcentaje al PIB mundial. Por otro lado, los países considerados como “socios estratégicos” aportan un porcentaje mucho menor que los “socios fundamentales”, quienes tienen gran relevancia en la economía mundial.
Se resalta que, aunque los resultados del análisis son coherentes con sus objetivos, la metodología de este estudio es simplificadora. Sin embargo, hace un aporte en cuanto a las estrategias de relaciones internacionales que debe desarrollar Colombia, y hacia qué destinos debe enfocar su atención. Mediante este análisis se adquiere información sobre las oportunidades y riesgos que el país tendría cuando crea interdependencia con los países estudiados. Esta actualización se llevó a cabo para revisar qué cambios surgieron en comparación con el primer estudio realizado por Concha et al. (2011).